¿Qué es la membrana subyacente transpirable?

¿Qué es la membrana subyacente transpirable?

Una membrana transpirable de subcapa, también conocida como membrana transpirable para techos o membrana de construcción, es un material utilizado en la construcción, especialmente en techos y paredes. Sirve como una capa adicional debajo del revestimiento exterior (como tejas, tejas de madera o revestimiento de paredes) y está diseñada para cumplir varias funciones importantes:

1. Impermeabilización: Las membranas transpirables subyacentes suelen ser impermeables o resistentes al agua, lo que impide que el agua de lluvia y la humedad penetren en la estructura. Esto ayuda a proteger el edificio de daños por agua y posibles filtraciones.

2. Transpirabilidad: Lo que distingue a las membranas transpirables de subsuelo es su capacidad para permitir que el vapor de humedad escape del interior del edificio. Esta transpirabilidad es importante para evitar la condensación dentro de la estructura del edificio. A medida que el aire cálido y húmedo asciende dentro de un edificio, puede condensarse en la parte inferior del techo o en las paredes interiores, lo que podría causar problemas como la pudrición y el moho. La naturaleza transpirable de la subsuelo permite que esta humedad escape, manteniendo un ambiente seco y saludable.

3. Resistencia al viento: Proporciona una barrera contra el viento, ayudando a mantener la eficiencia energética del edificio al evitar corrientes de aire y pérdida de calor.

4. Resistencia al polvo y los residuos: La membrana subyacente también actúa como una barrera contra el polvo, los residuos y los insectos, lo que garantiza una estructura más limpia y duradera.

Estas membranas suelen estar fabricadas con diversos materiales, como polipropileno hilado, polietileno u otros materiales sintéticos. La elección del material puede afectar la transpirabilidad, la impermeabilidad y la durabilidad de la membrana.

Las membranas transpirables de subsuelo se utilizan comúnmente en la construcción para cumplir con los requisitos del código de edificación y mejorar el rendimiento general de la envolvente del edificio. Son especialmente importantes en climas fríos y húmedos, donde el riesgo de condensación y problemas relacionados con la humedad es alto.